La importancia del protector solar

La mayoría de nosotros tiene la costumbre de llevar protector solar únicamente en días de verano, playa, piscina o clima caluroso. Y es normal: contemplar el sol en todo su esplendor nos lleva instintivamente a protegernos de él. Sin embargo, que no lo veamos no significa que no esté ahí: recordemos que estamos expuestos a sus rayos los 365 días del año, incluso en invierno.

Si bien es recomendable tomar algunas dosis diarias de sol no más de 10 minutos (dada su capacidad de mejorar nuestro ánimo y aumentar nuestros niveles de vitamina D), exponernos demasiado a sus rayos resulta peligroso, pues tiene impactos en la piel que van desde quemaduras y alergias, hasta brotes de acné, envejecimiento prematuro, o en el peor de los casos, riesgo de contraer cáncer.

Esto se debe a que la piel es mucho más que una simple cobertura de nuestro interior: se trata del órgano más grande del cuerpo, cuya función es protegernos de cualquier agente externo que resulte potencialmente dañino, como es la radiación, los químicos, las infecciones y un largo etc. Dado lo anterior, la piel se coloca como un factor clave para regular nuestro organismo.

Debemos usar protector solar desde niños, pues el 90% de la radiación de nuestra vida se acumula antes de los 18 años’, señalan los expertos. Debemos crear el hábito del bloqueador desde pequeños, sobre todo si consideramos que la radiación a la que estamos expuestos hoy no es la misma que hace años, ya que resulta más agresiva. Necesitamos cuidarnos todo el tiempo.

#etnico #cosechamosbienestar #healthy #healthylifestyle

Carrito de compra
Scroll al inicio